En el universo empresarial actual, donde las transformaciones digitales son la norma y no la excepción, el talento tecnológico ha dejado de ser un recurso más: es el motor que impulsa la innovación, la competitividad y la adaptación. Desde esta bitácora, no hablaremos del talento TI como una simple lista de vacantes, sino como un ecosistema vivo que evoluciona al ritmo del cambio tecnológico, las demandas del negocio y las aspiraciones humanas.