1. Decisiones más rápidas y acertadas: contar con datos confiables evita dudas y reduce tiempos en el análisis.
2. Aumento de la eficiencia operativa: menos errores significa menos costos en corrección.
3. Mejor experiencia del cliente: al tener información actualizada, se ofrecen soluciones personalizadas.
4. Cumplimiento normativo: una buena calidad de datos ayuda a cumplir con normativas como el GDPR.